cartas a él

Lo bueno de haber vivido bajo tu arquetipo por tantos años es que me enseñó varias cosas: 1. quitarle las emociones de las cosas que me mostraste y en algún momento que volviera a suceder me remontarían a tí y por lo tanto me recordaría esta premisa. 2. nada es para tanto. Por mucho que lloré y grite y patalee por años, al final no era para tanto y tu me lo dijiste básicamente en mi cara regresándome la tranquilidad de una vez por todas. 3. No cerrarse. Ya sé que ahora estoy así podrida, y que nunca había entendido realmente que era estar en un duelo - con excepción puede decirse de tí, y bueno también del otro aunque mas bien era otra cosa como enojo ya sabes- las cosas pasan y ya.

 Ya sé que las conclusiones que estoy llegando ahora ya las he tomado antes, incluso en tu tiempo, pero hay una cosa diferente sabes, que esta vez si tengo razones y no solo es como decir hablando por el dolor, mas bien algo que ya me había planteado y sabes, eso me hace sentir mucho mas tranquila. 4. Puede haber un día mas. Ese pensamiento, tal vez no lo sabes pero me atormentó mucho contigo. Quería un día mas para poder expresarme, y luego de mucho tiempo llegó. Ese día me atormentaba, pensar en eso era elemental, fantaseaba con que llegara el día más... y llegó y fue el último día, ahora no quiero eso no quiero eso de las esperanzas por que volvemos al punto anterior. 

Pero siempre en estos momentos me reconforta pensar en tí y pensar que donde quiera que estés me estás leyendo o que platicas conmigo. Por que lo que siempre fuiste para mí fue ser mi amigo y esa fue mi verdadera tristeza de perderte. Sabes, en este último viaje que tuve, encontré mucho mi anhelada espiritualidad, fue algo bonito y tormentoso a la vez, encontré muchos sentidos que había perdido, cuando hace tanto me abrí al mundo y me dí cuenta que no era el cuento fantástico que yo creía. 

Es bueno escribirte cartas, hace mucho que no lo hacía. Sé que no es importante mi persona ya para ti en este tiempo y no me causa tristeza, incluso es bueno, por que me recuerda que hemos estado caminando. Todo ese pensamiento me alegra, es como melancólico pero vamos adelante.

Yo soy feliz por tí, por que eres feliz, y eso es excelente. 

Yo no busco ya eso de las historias románticas sabes, busco mas bien aprender y en algún punto trascender, no en que quede mi paso, sino en que pueda irme ya de aquí y vaya al mundo de lo espiritual que tanto evoco.
Sé que saldré de esta, y si vieras lo mucho que he avanzado estarías orgulloso de mí. Ahora mismo estoy dejando un poco más atrás esto, y ya sé que ahorita quiero olvidar y solo eso, pero sabes, contigo me pasó igual, tuve que entrar en la negación un buen de rato para entenderlo. Así que creo que voy por buen camino. Lo que me inquieta un poco es que esta vez no he podido llorar, es raro, tu sabes que lloro mucho, a la mejor no hay nada que llorar y ya, pero ya sabes como es esto. PUes gracias, por que una vez más tus enseñanzas salieron a relucir y eso ahora mismo me está ayudando mucho junto a todo lo demás que recolecté por años.
Me he vuelto mucho mas fuerte, estarías orgulloso de mí.
Un beso.