miércoles, 28 de julio de 2010

encarnado

Luego de todas esas batallas guerreadas en vano -no me preguntes exactamente cuantas, he perdido la cuenta, solo sé que 4 en el útimo año-  tomé mi armadura,  y me dije. Basta.
Arranqué hasta el último fragmento ya casi encarnado y me dolió mucho.
La primera vez que me arranqué pedazos de metal de la piel dolió lo sé, pero rápidamente lo envestí de algo más para que nadie pudiera horrorizarse con los pellejos. Pero esto fue contraproducente.
Cuando el vestido se me desgarró por lo frágil que era... sangraba y sangraba y la herida parecia jamás dispuesta a cicatrizar, mas fuertes remedios y drogas me dieron y uno que otra limpiada a las infecciones para seguir adelante...
Esta vez no estaba dispuesta a que me volvieran a lastimar mi carne.
Pero una vez más con suave papel fue herida tantas veces que no me percaté de este dolor hasta ya verlo consumado, solo un intento mas... solo una vez más.
Y como me ví en terreno seguro, no me dió tanto terror volver a mostrar mi piel. Pero esta fue vista con espanto y apuñalada varias veces antes de yo reaccionar y defenderme.
Por un momento, mientras la noche negra me mostraba sus ganas de llorar, vi directamente a la luna y dije, maldita blancuzca hipócrita!... mas al otro momento incursione a dos días atras en donde decidí irme a arrancar toda la carne podrida.
Cuando llegue ahí, para que montones de médicos vestidos de diversos colores me examinaran, no pensé que fueran a ser tan severos conmigo, despues de todo  -pensé- que tanto daño se ha hecho. Pero sus caras alargadas preocupadas -con un poco de lástima- me dijeron que el daño era severo, pero, que no me preocupara, que sería recuperable.
Así que bajo unas fuertes drogas me acostaron en un quirófano ahí mismo con varios elementos metálicos se engancharon en las heridas y fueron removiendo lentamente todo ese metal y carne podrida.
Pensé que con una sola sesión bastaría.
Pero la verdad fue que me han dicho que tienen que ser más de las que me podría imaginar.....

No hay comentarios:

Publicar un comentario